viernes, 7 de diciembre de 2012

¿Quienes eran los cristianos primitivos?


 Algunas personas les denominan "los padres apostólicos", pero no  nos gusta  ese nombre, pues nuestro Señor Jesús nos ha dicho no llamar a nadie "padre" excepto nuestro Padre celestial. (Véase Mateo 23.9)
A continuación, se da un breve resumen de algunos de los escritores más conocidos de los cristianos primitivos.


PRIMER SIGLO
CLEMENTE DE ROMA-OBISPO EN ROMA
Clemente de Roma fue obispo de una iglesia en la ciudad de Roma en los fines del primer siglo. Su carta a la iglesia de Corinto es muy parecido a las cartas pastorales del Nuevo Testamento. Es muy posible que este Clemente conocía a Pablo de manera personal. No se debe confundir con Clemente de Alejandría, quién abajo está listado.

                                                                            IGNACIO-OBISPO EN ANTIOQUÍA
Ignacio fue obispo en Antioquía y es muy posible que él conocía al apóstol Juan personalmente. Sus cartas reflejan una victoria sobre el martirio, pues él estaba condenado a morir por su fe en Jesús.

POLICARPO—DISCÍPULO DEL APÓSTOL JUAN
Policarpo servía a las congregaciones de Asia. En su juventud él acompañó al apóstol Juan y aprendió a sus pies. Parece ser que Juan mismo lo ordenó como obispo de la congregación en Esmirna. Si es correcto que "los ángeles" de las siete iglesias de Apocalipsis se refieren a los obispos de las iglesias, entonces "el ángel" de la iglesia en Esmirna pueda haber sido el mismo Policarpo. (Véase Apocalipsis 1.20 y 2.8.) Si es así, qué grato es notar que el Señor Jesucristo no reprendió en nada a la iglesia de Esmirna. Policarpo vivió hasta una edad de por lo menos 87 años. Fue martirizado alrededor del año 155 d. de J.C.
SEGUNDO SIGLO

IRENEO—ESLABÓN IMPORTANTE CON LOS APÓSTOLES
Uno de los discípulos personales de Policarpo fue Ireneo, quien después se mudó a Francia como misionero. Cuando el obispo de la congregación en Lyon fue muerto en una ola de persecución, Ireneo fue llamado a reemplazarle. La iglesia en todo el mundo elogiaba a Ireneo como hombre justo y piadoso. Como discípulo de Policarpo, quien a su vez era discípulo del apóstol Juan, Ireneo sirve como eslabón importante con la época de los apóstoles. Fue martirizado cerca del año 200.

JUSTINO EL MÁRTIR—FILÓSOFO CONVERTIDO EN EVANGELISTA
Durante la vida de Policarpo, un filósofo joven llamado Justino emprendió un viaje espiritual en búsqueda de la verdad. El solía andar en un campo solitario que miraba hacia el Mar Mediterráneo para meditar. Un día mientras andaba allí vio que un anciano caminaba tras él. Deseando la soledad, Justino se dio vuelta y miró bruscamente al anciano intruso. Pero el anciano no se molestó. Más bien comenzó a conversar con Justino.
Al aprender que Justino era filósofo, el anciano le hizo preguntas escudriñadoras, preguntas que ponían a la luz lo vacío de la filosofía humana. Años después, Justino contó los recuerdos de aquel encuentro, escribiendo: "Cuando el anciano había terminado de hablar estas cosas y muchas más, se fue, exhortándome a que meditara en lo que había hablado. Desde entonces no lo he visto, pero de inmediato una llama se encendió en mi alma. Me inundó un gran amor por los profetas y los amigos de Cristo. Después de reflexionar más en lo que el anciano me había dicho, me di cuenta de que el cristianismo era la única filosofía verdadera y valiosa."

Aun después de convertirse al cristianismo, Justino siempre se ponía su túnica de filósofo para dar a conocer que él había hallado la única filosofía verdadera. En verdad, él se convirtió en evangelista para los filósofos paganos. Dedicó su vida a aclarar el significado del cristianismo a los romanos cultos. Sus defensas escritas a los romanos son las apologías cristianas más antiguas que existen.
Justino se demostró evangelista capacitado. Convirtió a muchos romanos a la fe cristiana, tanto cultos como incultos. Al fin, un grupo de filósofos, tramando su muerte, le mandaron aprehender. Justino escogió morir antes de negar a Cristo. Fue martirizado hacia el año 165. Después de su muerte, fue conocido por muchos como Justino el mártir.
CLEMENTE DE ALEJANDRÍA—INSTRUCTOR DE NUEVOS CONVERSOS
Otro filósofo que halló el cristianismo en su búsqueda de la verdad fue Clemente. Viendo la vanidad de la filosofía humana, se volvió a Cristo. Después de convertirse en cristiano, viajó por todo el imperio romano, aprendiendo los preceptos de la fe cristiana personalmente de los maestros cristianos más ancianos y estimados. Los escritos de Clemente, fechados hacia el año 190, reflejan la suma de la sabiduría de sus maestros. Han inspirado a muchos cristianos a través de los siglos, inclusive a Juan Wesley. Con el tiempo, Clemente se mudó a Alejandría, Egipto. Fue ordenado anciano en aquella congregación y encargado de instruir a los nuevos conversos.

ORÍGENES—UNA MENTE AGUDA DEDICADA A DIOS
Entre los alumnos de Clemente en Alejandría había un joven hábil llamado Orígenes. Cuando Orígenes tenía sólo 17 años, estalló una persecución severa en Alejandría. Los padres de Orígenes eran cristianos fieles, y cuando su padre fue apresado, Orígenes le escribió una carta, animándolo a que permaneciera fiel y no renunciara a Cristo por causa de su preocupación por su familia. Cuando se anunció la fecha para su juicio, Orígenes decidió acompañar a su padre al juicio para morir con el. Pero durante la noche anterior, mientras dormía, su madre escondió toda su ropa para que no pudiera salir de la casa. Así es que se le salvó la vida.
Aunque tenía sólo 17 años, Orígenes se distinguió en la iglesia de Alejandría por el cuidado amoroso que prestaba a sus hermanos en la fe durante la persecución. Pero las turbas enfurecidas también notaron el cuidado de Orígenes por los cristianos perseguidos, y en varias ocasiones Orígenes apenas escapó con la vida.
Orígenes había aprendido la gramática y la literatura griega de su padre, y empezó a dar clases privadas para sostener a sus hermanos menores. Era maestro tan sobresaliente que muchos padres paganos mandaron a sus hijos a recibir instrucción de Orígenes. Pero muchos de estos jóvenes se convirtieron en cristianos como resultado del testimonio de Orígenes.
Mientras tanto, Clemente, el maestro encargado del adoctrinamiento de los nuevos conversos, estaba en peligro. Los oficiales de la ciudad tramaron su muerte, y él se vio obligado a escapar a otra ciudad para continuar su servicio cristiano. En una decisión extraordinaria, los ancianos cristianos de Alejandría le nombraron a Orígenes, de sólo 18 años, para tomar el lugar de Clemente como maestro principal en la escuela para los nuevos conversos. Fue decisión sabia, y Orígenes se dedicó de corazón a la obra. Dejó su profesión de pocos meses como instructor de gramática y literatura. Vendió a plazos todos sus libros de obras griegas, viviendo en la pobreza de lo poquito que recibió mensualmente de la venta de ellos. Rehusó aceptar sueldo alguno por su trabajo como maestro cristiano. Y después de sus clases de cada día, estudiaba las Escrituras hasta horas avanzadas de la noche.
Pronto Orígenes llegó a ser uno de los maestros más estimados de su día. A los pocos años, algunos de sus alumnos le pidieron que diera una serie de discursos de exposición bíblica, comentando sobre cada libro de la Biblia, pasaje por pasaje. Los alumnos pagaron escribas los cuales escribieron lo que Orígenes decía, y estos escritos llegaron a ser los primeros comentarios bíblicos que se produjeron. No fue intención de Orígenes que estos comentarios se tomaran muy en serio. A menudo él se salía del texto y daba suposiciones personales. En todo el comentario, mantuvo un espíritu apacible, poco contencioso. Muchas veces terminó su discurso, diciendo: "Bien que así me parece a mí, pero puede ser que otro tenga más entendimiento que yo".
Orígenes tenía una de las más brillantes mentes de su día. Estaba en correspondencia personal con uno de los emperadores romanos. Pero su fama también atrajo la atención de los enemigos de los cristianos. Varias veces tuvo que trasladarse para otro lugar para escapar de la persecución. Sin embargo, llegó a los 70 años. En ese entonces sus perseguidores lo aprehendieron y lo torturaron. Pero por más que lo torturaron, él no negó a Jesús. Y al fin dejaron de torturarlo, exasperados. Con todo, Orígenes nunca se recuperó de la tortura y al fin murió.
TERTULIANO—APOLOGISTA A LOS ROMANOS
A los cristianos del occidente, Tertuliano es quizás el más conocido de todos los escritores cristianos de los primeros siglos. Llegó a ser anciano en la iglesia de Cartago en el África del norte.4 Tertuliano era uno de los apologistas más hábiles de la iglesia primitiva. El escribió en latín, no en griego como la mayoría de los cristianos primitivos. A Tertuliano se le recuerda por varios dichos famosos, por ejemplo: "La sangre de los mártires es la semilla de la iglesia".
Tertuliano escribió entre los años 190 y 210 d. de J.C. Además de sus obras apologéticas, Tertuliano escribió varias obras cortas, tanto cartas como tratados, para animar a los cristianos apresados o para exhortar a los creyentes que mantuvieran su separación con el mundo.
Al final de su vida, Tertuliano se unió a la secta montanista, la cual por lo general se aferró a la doctrina cristiana ortodoxa, pero añadió normas estrictas sobre la disciplina en la iglesia y el trato duro del cuerpo. Por lo menos la mitad de las obras de Tertuliano se escribieron antes que él se hiciera montanista. Y además, ya que este grupo no se apartó de los fundamentos de la fe cristiana, aun sus escritos de después tienen gran valor en iluminar el pensamiento de los cristianos primitivos.
TERCER SIGLO
CIPRIANO—UN RICO QUE TODO LO ENTREGÓ A CRISTO
Uno de los alumnos espirituales de Tertuliano se llamaba Cipriano. Había sido romano rico, pero se convirtió en cristiano a la edad de 40 años. Aunque alumno de Tertuliano, no se unió a los montanistas. Siempre se opuso a los herejes y a las tendencias sectarias.
Como cristiano recién convertido, Cipriano estaba tan agradecido por su vida nueva en Cristo que vendió todo lo que tenía y lo repartió a los pobres. Se gozó de estar libre del peso de las responsabilidades de sus posesiones materiales. Sus escritos contienen unas de las palabras más conmovedoras que jamás se han escrito acerca del nuevo nacimiento del cristiano. Su entrega total a Cristo pronto ganó el respeto de la iglesia en Cartago. Después de unos pocos años, en una decisión sin precedente, le llamaron a ser obispo de la iglesia allí.
Los escritos de Cipriano tienen un valor especial ya que constan mayormente de cartas personales a otros ancianos cristianos e iglesias. En sus cartas vemos los intereses y los problemas diarios de las congregaciones cristianas de aquel entonces. Cipriano se vio obligado a trabajar como pastor clandestinamente, ya que durante la mayor parte de su ministerio rugía la persecución contra la iglesia. Como pastor, trabajaba incansablemente, dando su tiempo y su vida por el rebaño de Cristo que le había sido

encomendado. Al fin, fue aprehendido por los romanos y decapitado en el año 258.

LACTANCIO—MAESTRO DEL HIJO DEL EMPERADOR
Lactancio es poco conocido a los cristianos de hoy en día. En esto, nosotros perdemos, porque Lactancio escribió con claridad y elocuencia extraordinaria. Antes de convertirse al cristianismo, fue instructor célebre de la retórica. Aun el emperador Diocleciano le alabó. Después de su conversión, dedicó sus habilidades literarias a la causa de Cristo. Sobrevivió la última gran persecución de los romanos contra la iglesia al principio del cuarto siglo. Con el tiempo, hizo su hogar en Francia. Aunque Lactancio era muy anciano cuando Constantino se hizo emperador, éste le pidió que volviera a Roma para ser el profesor particular de su hijo mayor.
Los escritos de Lactancio tienen gran importancia para nosotros porque se escribieron al final de la época pre-Constantina de la iglesia. Demuestran ampliamente que la gran mayoría de las creencias cristianas habían cambiado muy poco durante los 220 años entre la muerte del apóstol Juan y el principio del reinado de Constantino.

Se recomienda la lectura de Cuando el cristianismo era nuevo, libro del cual fue sacado algunas partes de las arriba introducciones.

para leer y descargar el libro has click aqui: Visita libros y tratados 


martes, 4 de diciembre de 2012

CANON DEL NUEVO TESTAMENTO


La autenticidad de nuestro Nuevo Testamento tiene su fundamento en la integridad de los primeros cristianos. Los líderes de la iglesia primitiva reunieron, preservaron, y probaron la autenticidad de los escritos que nosotros ahora llamamos el Nuevo Testamento.

Respecto a Marcos, el que escribió el evangelio: Y el anciano dijo esto también: Marcos, habiendo pasado a ser el intérprete de Pedro, escribió exactamente todo lo que recordaba, sin embargo no registrándole en el orden que había sido hecho por Cristo. Porque él ni oyó al Señor ni le siguió; pero después, como he dicho, (ayudó) a Pedro, el cual adaptó sus instrucciones a las necesidades (de sus oyentes), pero no tenía intención de dar un relato conexo de las palabras del Señor. Papías (120 d.C.)

Mateo, (que predicó) a los hebreos en su propia lengua, también puso por escrito el evangelio, cuando Pedro y Pablo evangelizaban y fundaban la iglesia. Una vez que éstos murieron, Marcos, discípulo e intérprete de Pedro, también nos transmitió por escrito la predicación de Pedro. Igualmente Lucas, seguidor de Pablo, consignó en un libro el evangelio que éste predicaba. Por fin Juan, el discípulo del Señor que se había recostado sobre su pecho, redactó el evangelio cuando residía en Efeso. Ireneo (180 d.C.)


Y si alguien investiga con cuidado en los Hechos de los apóstoles la época a la que Pablo se refiere cuando escribe “subí a Jerusalén” por el problema antedicho, verá que los años corresponden con precisión a los que Pablo ha señalado. Así pues, la predicación de Pablo y el testimonio de Lucas concuerdan y son prácticamente los mismos… Lucas narra por orden todo lo que llevó a cabo con Pablo, indicando con toda diligencia los lugares, ciudades y número de días, hasta que subieron a Jerusalén… Lucas estuvo presente en todo y lo redactó minuciosamente, a fin de que nadie lo juzgue un mentiroso o arrogante, pues todos estos hechos eran conocidos, y él es más antiguo que todos aquellos que andan diciendo que ignoraba la verdad. Ireneo (180 d.C.)

Es esta autoridad de las iglesias apostólicas la que garantiza los demás evangelios que nos han llegado a través de ellas y según la interpretación de ellas, a saber, el de Juan, el de Mateo, y el que publicó Marcos, aunque se dice que es de Pedro, de quien Marcos era intérprete, y el que compuso Lucas, cuyo contenido se atribuye a Pablo. Tertuliano (197 d.C.)

Veamos cuál es la leche que los corintios bebieron del apóstol Pablo, según qué principios fueron reprendidos los gálatas, qué se escribió a los filipenses, a los tesalonicenses, a los efesios, qué es lo que los romanos oyen directamente, a los que tanto Pedro como Pablo les dejaron el evangelio sellado con su propia sangre. Tenemos también las iglesias que se alimentaron de Juan: porque, aunque Marción (un maestro entre los herejes) rechaza su Apocalipsis, si recorremos la sucesión de los obispos hasta su origen terminaremos en Juan, su autor. Tertuliano (197 d.C.)

El apóstol escribe: “Oh Timoteo, guarda lo que se te ha encomendado, evitando las profanas pláticas sobre cosas vanas, y los argumentos del falsamente llamado conocimiento.”… Convictos por este enunciado, los herejes rechazan las epístolas a Timoteo. Clemente de Alejandría (195 d.C.)

Los Hechos de los apóstoles también atestiguan la resurrección. (Tertuliano 210 d.C.)
Pero la carta de Judas y las dos escritas con el nombre de Juan han sido aceptadas en la [iglesia] universal; la Sabiduría también, escrita por los amigos de Salomón en su honor. El Apocalipsis de Juan también recibimos. Fragmentos de muratori (200 d.C.)

Después de la ascensión de Cristo, Lucas el médico, el cual Pablo había llevado consigo como experto jurídico, escribió en su propio nombre concordando con la opinión de [Pablo]. Sin embargo, él mismo nunca vio al Señor en la carne y, por lo tanto, según pudo seguir... empezó a contarlo desde el nacimiento de Juan. Fragmentos de muratori (200 d.C.)

El cuarto evangelio es de Juan, uno de los discípulos. Fragmentos de muratori (200 d.C.)

Los Hechos de todos los apóstoles han sido escritos en un libro. Dirigiéndose al excelentísimo Teófilo, Lucas incluye una por una las cosas que fueron hechas delante de sus propios ojos, lo que él muestra claramente al omitir la pasión de Pedro, y también la salida de Pablo al partir de la ciudad para España. Fragmentos de muratori (200 d.C.)

En cuanto a las cartas de Pablo, ellas mismas muestran a los que deseen entender desde qué lugar y con cuál fin fueron escritas. En primer lugar [escribió] a los Corintios prohibiendo divisiones y herejías; luego a los Gálatas [prohibiendo] la circuncisión; a los Romanos escribió extensamente acerca del orden de las escrituras y también insistiendo que Cristo fuese el tema central de éstas. Nos es necesario dar un informe bien argumentado de todos éstos ya que el bendito apóstol Pablo mismo, siguiendo el orden de su predecesor Juan, pero sin nombrarle, escribe a siete iglesias en el siguiente orden: primero a los Corintios, segundo a los Efesios, en tercer lugar a los Filipenses, en cuarto lugar a los Colosenses, en quinto lugar a los Gálatas, en sexto lugar a los Tesalonicenses, y en séptimo lugar a los Romanos. Sin embargo, aunque [el mensaje] se repita a los Corintios y los Tesalonicenses para su reprobación, se reconoce a una iglesia como difundida a través del mundo entero. Porque también Juan, aunque escribe a siete iglesias en el Apocalipsis, sin embargo escribe a todas. Además, [Pablo escribe] una [carta] a Filemón, una a Tito, dos a Timoteo, en amor y afecto; pero han sido santificadas para el honor de la iglesia. Fragmentos de muratori (200 d.C.)

Marción (un maestro gnóstico) rechaza las dos epístolas a Timoteo y la epístola a Tito: todo lo relacionado con la disciplina de la iglesia. (Tertuliano 207 d.C.)

Si alguien debería citarnos del pequeño tratado titulado La enseñanza de Pedro… tengo que responder en primer lugar que dicha obra no está incluida entre los libros eclesiásticos. Pues podemos demostrar que ella no fue compuesta ni por Pedro ni por ninguna otra persona inspirada por el Espíritu de Dios. Orígenes (225 d.C.)

¿ QUE TIPO DE TIERRA SOMOS ?


    LUCAS 8     PARÁBOLA DEL SEMBRADOR 


 4.Juntándose una gran multitud, y los que de cada ciudad venían a él, les dijo por parábola:
5. El sembrador salió a sembrar su semilla; y mientras sembraba, una parte cayó junto al caminoy fue hollada, y las aves del cielo la comieron.
6. Otra parte cayó sobre la piedra; y nacida, se secó, porque no tenía humedad.
7. Otra parte cayó entre espinos, y los espinos que nacieron juntamente con ella, la ahogaron.
8. Y otra parte cayó en buena tierra, y nació y llevó fruto a ciento por uno. Hablando estas cosas, decía a gran voz: El que tiene oídos para oír, oiga.

9. Y sus discípulos le preguntaron, diciendo: ¿Qué significa esta parábola?
10. Y él dijo: A vosotros os es dado conocer los misterios del reino de Dios; pero a los otros por parábolas, para que viendo no vean, y oyendo no entiendan.
11. Esta es, pues, la parábola: La semilla es la palabra de Dios.
12. Y los de junto al camino son los que oyen, y luego viene el diablo y quita de su corazón la palabra, para que no crean y se salven.
13. Los de sobre la piedra son los que habiendo oído, reciben la palabra con gozo; pero éstos no tienen raíces; creen por algún tiempo, y en el tiempo de la prueba se apartan.
14. La que cayó entre espinos, éstos son los que oyen, pero yéndose, son ahogados por los afanes y las riquezas y los placeres de la vida, y no llevan fruto.
15. Mas la que cayó en buena tierra, éstos son los que con corazón bueno y recto retienen la palabra oída, y dan fruto con perseverancia.
16. Nadie que enciende una luz la cubre con una vasija, ni la pone debajo de la cama, sino que la pone en un candelero para que los que entran vean la luz.
17. Porque nada hay oculto, que no haya de ser manifestado; ni escondido, que no haya de ser conocido, y de salir a luz.
18. Mirad, pues, cómo oís; porque a todo el que tiene, se le dará; y a todo el que no tiene, aun lo que piensa tener se le quitará.

 ¿SOMOS  BUENA TIERRA?                                                                                                                                         Entoncs que nuestra vida de frutos dignos de arrepentimeinto, y que nuestra Fé no sea una Fé temporal, sino que persevere pese a las dificultades


DOS ELEMENTOS BÁSICOS DE LAS INSTITUCIONES DE CALVINO

La Soberanía y la Predestinación

Un fundamento básico del sistema religioso de Calvino era un punto de vista extremista de la soberanía de Dios que negaba la voluntad humana y que consideraba que la Iglesia era el reino de Dios en la tierra – ambos enfoques inspirados por los escritos de Agustín. Verduin escribe de Agustín: “Aquí tenemos una representación temprana de la noción que la Iglesia de Cristo fue destinada por su Fundador a entrar en una situación radicalmente diferente de la descrita en el Nuevo Testamento… Esta idea expuesta por Agustín…condujo a toda clase de absurdos teológicos”.

Agustín enseñó que la presciencia era lo mismo que la predestinación: “Por consiguiente, algunas veces la misma predestinación se expresa también bajo el nombre de presciencia”. Así pues, la presciencia de Dios causa los eventos futuros. De forma interesante, R.C. Sproul escribe que “virtualmente nada en el punto de vista de Calvino acerca de la predestinación…no estuvo primero en Martín Lutero y antes de Lutero en Agustín”. Calvino vio a Dios como el autor de todo evento, incluyendo a todos los pecados:

Si Dios solamente hubiera previsto lo que había de acontecer a los hombres, y no lo ordenase según su gusto, entonces con toda razón se plantearía la cuestión de saber qué necesidad pondría en los hombres la divina presciencia; pero dado que…El ha determinado que así sean…es evidente, que todo se hace por ordenación y disposición divina.



R.C. Sproul declara claramente, “Dios quiere todas las cosas que suceden…Dios creó el pecado”. De este enfoque extremo de la soberanía de Dios provino la comprensión de Calvino acerca de la predestinación. Según él (siguiendo la enseñanza de Agustín), en la eternidad pasada Dios decidió salvar sólo a una fracción de la raza humana y consignó al resto al tormento eterno – sencillamente porque a Él le plació hacerlo:

La Escritura lo demuestra con toda evidencia…que Dios ha designado de una vez para siempre en su eterno e inmutable consejo, a aquellos que quiere que se salven, y también a aquellos que quiere que se condenen.

Así que aquellos ante los cuales Dios pasa al elegir, los reprueba; y esto por la sola razón de que Él los quiere excluir de la herencia que ha predestinado para sus hijos.

Pero si todos los que el Señor predestina a la muerte están naturalmente sujetos a la sentencia de muerte, ¿de qué iniquidad e injusticia, pregunto yo, podrán quejarse…porque antes de ser engendrados han sido predestinados por su providencia eterna a perpetua miseria…qué podrán murmurar contra Dios?

El gran Dios…en cuya mano y voluntad está castigar a los transgresores, aunque El no les haya dado su Espíritu…de lo cual no se puede aducir otra causa que la reprobación, que permanece escondida en el secreto consejo de Dios.

Como quiera, pues, que la ordenación de todas las cosas está en las manos de Dios… ordena con su consejo que algunos desde el seno materno sean destinados a una muerte eterna ciertísima, y que con su perdición glorifiquen su nombre.

Dios, según el decreto de su benevolencia elige como hijos a aquellos a quienes le place; y esto sin mérito alguno de ellos, reprobando y rechazando a los demás…Es razonable que se muestre como justo juez castigando.

Por eso vienen muy a propósito las siguientes sentencias de san Agustín…que otros sean vasos de afrenta, no se debe imputar a iniquidad, pues no la hay en Dios, sino a su juicio.

En sus Institutos, Calvino enfatiza la soberanía pero apenas menciona el amor de Dios por los pecadores. Lutero, también, estaba convencido que Dios, por Su propia elección soberana e independiente de cualquier cosa en el hombre, había desde la eternidad pasada determinado a quién salvaría y a quién condenaría. Calvino (como Agustín y la mayoría de calvinistas de hoy) dijo que Dios podía prever el futuro sólo porque Él lo había deseado. Aquí tenemos la espantosa doctrina de la reprobación de la propia pluma de Calvino, haciéndose eco una vez más de su mentor, Agustín:

Decimos, pues, — como la Escritura lo demuestra con toda evidencia — que Dios ha designado de una vez para siempre en su eterno e inmutable consejo, a aquellos que quiere que se salven, y también a aquellos que quiere que se condenen. Decimos que este consejo, por lo que toca a los elegidos, se funda en la gratuita misericordia divina sin respecto alguno a la dignidad del hombre; al contrario, que la entrada de la vida está cerrada para todos aquellos que Él quiso entregar a la condenación; y que esto se hace por su secreto e incomprensible juicio, el cual, sin embargo, es justo e irreprochable… Al excluir a los réprobos…muestra con estas señales cuál será su fin y qué juicio les está preparado.

Por Dave Hunt 


Tomado del libro, ¿Qué Amor es Éste?, escrito por Dave Hunt.
En defensa de la fe.

LA CRUZ CON LA QUE TROPIEZAN LA MAYORÍA DE LAS MUJERES CRISTIANAS PROFESAS:


Asimismo que las mujeres se atavíen de ropa decorosa, con pudor y modestia; no con peinado ostentoso, ni oro, ni perlas, ni vestidos costosos, sino con buenas obras, como corresponde a mujeres que profesan piedad. La mujer aprenda en silencio, con toda sujeción. Porque no permito a la mujer enseñar, ni ejercer dominio sobre el hombre, sino estar en silencio. Porque Adán fue formado primero, después Eva; y Adán no fue engañado, sino que la mujer, siendo engañada, incurrió en transgresión. Pero se salvará engendrando hijos, si permaneciere en fe, amor y santificación, con modestia.   1 Timoteo 2:9-15

Pero toda mujer que ora o profetiza con la cabeza descubierta, afrenta su cabeza; porque lo mismo es que si se hubiese rapado. Porque si la mujer no se cubre, que se corte también el cabello; y si le es vergonzoso a la mujer cortarse el cabello o raparse, que se cubra. 1 Cor 11:5-6

Vuestras mujeres callen en las congregaciones; porque no les es permitido hablar, sino que estén sujetas, como también la ley lo dice. Y si quieren aprender algo, pregunten en casa a sus maridos; porque es indecoroso que una mujer hable en la congregación.   1 Cor 14:34-35

 por René de Jesús Almada Almada

BENDICIONES

EL TROPEZADERO DE LA CRUZ.

LA GRAN MAYORÍA DE LOS CRISTIANOS PROFESOS CREEN EN LA MUERTE Y RESURRECCIÓN DE NUESTRO SEÑOR JESUCRISTO, RECONOCEN QUE ES EL HIJO DE DIOS,           TAMBIÉN RECONOCEN SUS MILAGROS Y TODAS LAS SEÑALES QUE HIZO AL ESTAR EL EN LA TIERRA, PERO AL HABLARLES DE LA CRUZ Y DE QUE DEBEMOS ANDAR COMO EL ANDUVO, ES AHÍ DONDE TROPIEZAN.



AL CALCULAR EL COSTO Y EMPEZAR A CONSTRUIR SU TORRE O AL VER AL EJERCITO CONTRARIO VENIR (Lc 14:25-33 ), PREFIEREN HACER CONCESIONES CON EL ENEMIGO Y ENTONCES SURGEN ARGUMENTOS COMO: NO ES LITERAL LO QUE JESÚS DIJO......., SI JESÚS DIJO ESO PERO LO QUE SIGNIFICA ES......, JESÚS DIJO ESO PERO PABLO DIJO........ETC, ETC.


EN LA ACTUALIDAD SE HAN AMONTONADO MAESTROS CONFORME A LAS CONCUPISCENCIAS DE CADA UNO FORMANDO DIFERENTES GRUPOS, EN LOS CUALES INTERPRETAN LA PALABRA DE MANERA QUE PUEDEN SALTARSE LOS MANDAMIENTOS DADOS POR NUESTRO SEÑOR PARA OBEDECER EN LA GRACIA. ASÍ QUIEREN ENTRAR AL CIELO Y OBTENER LA SALVACIÓN, POR UN CAMINO O PUERTA DISTINTOS A LA QUE NUESTRO SEÑOR NOS DEJO PARA QUE NOSOTROS SIGUIÉRAMOS SUS PISADAS.

De cierto, de cierto os digo: El que no entra por la puerta en el redil de las ovejas, sino que sube por otra parte, ése es ladrón y salteador. Mas el que entra por la puerta, el pastor de las ovejas es. A éste abre el portero, y las ovejas oyen su voz; y a sus ovejas llama por nombre, y las saca. Y cuando ha sacado fuera todas las propias, va delante de ellas; y las ovejas le siguen, porque conocen su voz. Mas al extraño no seguirán, sino huirán de él, porque no conocen la voz de los extraños. Esta alegoría les dijo Jesús; pero ellos no entendieron qué era lo que les decía. Juan 10:1-6

LOS VERDADEROS DISCÍPULOS DE JESUCRISTO DISCIERNEN ESTAS FALSAS ENSEÑANZAS Y SE APARTAN DE ESTOS FALSOS MAESTROS, QUE ESTÁN LLEVANDO A SUS SEGUIDORES A LA APOSTASÍA PROFETIZADA POR LA PALABRA PARA ESTOS ÚLTIMOS TIEMPOS.

Pero cuando venga el Hijo del Hombre, ¿hallará fe en la tierra? 
Lc 18:8

LA VERDAD ES QUE PARA SER UN VERDADERO SEGUIDOR DE JESUCRISTO, ES NECESARIO LLEVAR LA CRUZ. LA CRUZ QUE NOS MATA TOTALMENTE, PARA DE ESA MANERA PODER VER EL REINO DE DIOS AHORA CON UNA NUEVA VIDA EN CRISTO.

LA PALABRA ES SUMAMENTE CLARA, OBSERVEMOS LO QUE NOS ORDENA:


LA CRUZ QUE TE LLEVA A LA MUERTE........PARA VIDA!!!

Y alguien le dijo: Señor, ¿son pocos los que se salvan? Y él les dijo: Esforzaos a entrar por la puerta angosta; porque os digo que muchos procurarán entrar, y no podrán.  
Lc 13:23-24

El que ama a padre o madre más que a mí, no es digno de mí; el que ama a hijo o hija más que a mí, no es digno de mí; y el que no toma su cruz y sigue en pos de mí, no es digno de mí. El que halla su vida, la perderá; y el que pierde su vida por causa de mí, la hallará.
Mt 10:37-39

Entonces Jesús dijo a sus discípulos: Si alguno quiere venir en pos de mí, niéguese a sí mismo, y tome su cruz, y sígame.     
Mt 16:24-25

Pero lejos esté de mí gloriarme, sino en la cruz de nuestro Señor Jesucristo, por quien el mundo me es crucificado a mí, y yo al mundo.Gal 6:14

Y ellos le han vencido por medio de la sangre del Cordero y de la palabra del testimonio de ellos, y menospreciaron sus vidas hasta la muerte.         
Ap 12:11

Entrad por la puerta estrecha; porque ancha es la puerta, y espacioso el camino que lleva a la perdición, y muchos son los que entran por ella; porque estrecha es la puerta, y angosto el camino que lleva a la vida, y pocos son los que la hallan.       
Mt 7:13-14

Porque por ahí andan muchos, de los cuales os dije muchas veces, y aun ahora lo digo llorando, que son enemigos de la cruz de Cristo; el fin de los cuales será perdición, cuyo dios es el vientre, y cuya gloria es su vergüenza; que sólo piensan en lo terrenal.     
Fil 3:18-19

Y si hijos, también herederos; herederos de Dios y coherederos con Cristo, si es que padecemos juntamente con él, para que juntamente con él seamos glorificados.     
Rom 8:17

Pues ¿qué gloria es, si pecando sois abofeteados, y lo soportáis? Más si haciendo lo bueno sufrís, y lo soportáis, esto ciertamente es aprobado delante de Dios. Pues para esto fuisteis llamados; porque también Cristo padeció por nosotros, dejándonos ejemplo, para que sigáis sus pisadas.     
1 Ped 2:20-21

Pero los que son de Cristo han crucificado la carne con sus pasiones y deseos.      
Gal 5:24

El que dice que permanece en él, debe andar como él anduvo.                 
1 Juan 2.6

El Señor le dijo: Ve, porque instrumento escogido me es éste, para llevar mi nombre en presencia de los gentiles, y de reyes, y de los hijos de Israel; porque yo le mostraré cuánto le es necesario padecer por mi nombre.         
Hechos 9:15-16

Con Cristo estoy juntamente crucificado, y ya no vivo yo, mas vive Cristo en mí; y lo que ahora vivo en la carne, lo vivo en la fe del Hijo de Dios, el cual me amó y se entregó a sí mismo por mí.         
Gal 2:20

Entonces Jesús, mirándole, le amó, y le dijo: Una cosa te falta: anda, vende todo lo que tienes, y dalo a los pobres, y tendrás tesoro en el cielo; y ven, sígueme, tomando tu cruz. Pero él, afligido por esta palabra, se fue triste, porque tenía muchas posesiones.    
Mr 10:21

al cual resistid firmes en la fe, sabiendo que los mismos padecimientos se van cumpliendo en vuestros hermanos en todo el mundo. Mas el Dios de toda gracia, que nos llamó a su gloria eterna en Jesucristo, después que hayáis padecido un poco de tiempo, él mismo os perfeccione, afirme, fortalezca y establezca.  
1 Ped 5:9-10

Pero yo os digo: No resistáis al que es malo; antes, a cualquiera que te hiera en la mejilla derecha, vuélvele también la otra; y al que quiera ponerte a pleito y quitarte la túnica, déjale también la capa; y a cualquiera que te obligue a llevar carga por una milla, ve con él dos. Al que te pida, dale; y al que quiera tomar de ti prestado, no se lo rehúses.  
Mt 5:39-42

Tanto, que nosotros mismos nos gloriamos de vosotros en las iglesias de Dios, por vuestra paciencia y fe en todas vuestras persecuciones y tribulaciones que soportáis. Esto es demostración del justo juicio de Dios, para que seáis tenidos por dignos del reino de Dios, por el cual asimismo padecéis.  
2 Tes 1:4-5

A fin de conocerle, y el poder de su resurrección, y la participación de sus padecimientos, llegando a ser semejante a él en su muerte. 
Fil 3:10

y por todos murió, para que los que viven, ya no vivan para sí, sino para aquel que murió y resucitó por ellos.   
2 Cor 5:15

Y aunque era Hijo, por lo que padeció aprendió la obediencia.          Hebreos 5:8

Hermanos míos, no os extrañéis si el mundo os aborrece. En esto hemos conocido el amor, en que él puso su vida por nosotros; también nosotros debemos poner nuestras vidas por los hermanos.
1 Juan 3:13, 16 



Amados, no os sorprendáis del fuego de prueba que os ha sobrevenido, como si alguna cosa extraña os aconteciese, sino gozaos por cuanto sois participantes de los padecimientos de Cristo, para que también en la revelación de su gloria os gocéis con gran alegría. Si sois vituperados por el nombre de Cristo, sois bienaventurados, porque el glorioso Espíritu de Dios reposa sobre vosotros. Ciertamente, de parte de ellos, él es blasfemado, pero por vosotros es glorificado.        
1 Ped 4:12-14

 por René de Jesús Almada Almada 

HUYE DEL ANIMO INDECISO, DEL TEMPERAMENTO IRASCIBLE Y LA TRISTEZA.


HUYE DEL ANIMO INDECISO, DEL TEMPERAMENTO IRASCIBLE Y LA TRISTEZA.


Y él me dijo: «Aparta de ti todo ánimo indeciso y no dudes en absoluto de si has de hacer suplicar a Dios, diciéndote a ti mismo: "¿Cómo puedo pedir una cosa del Señor y recibirla siendo así que he cometido tantos pecados contra Él?" No razones de esta manera, sino vuélvete al Señor de todo corazón, y no le pidas nada vacilando, y conocerás su gran compasión, pues Él, sin duda, no te abandonará, sino que cumplirá la petición de tu alma. Porque Dios no es como los hombres que guardan rencores, sino que El mismo es sin malicia y tiene compasión de sus criaturas. Limpia, pues, tu corazón de todas las vanidades de esta vida, y de las cosas mencionadas antes; y pide al Señor, para que recibas todas las cosas, y no se te negará ninguna de todas tus peticiones si no pides al Señor las cosas vacilando. Pero si fluctúas en tu corazón no recibirás ninguna de tus peticiones. Porque los que vacilan respecto a Dios son los de ánimo indeciso, y éstos nunca obtienen sus peticiones. Pero los que están llenos en la fe, hacen todas sus peticiones confiando en el Señor, y reciben porque piden sin vacilación, sin dudar; porque todo hombre de ánimo indeciso, si no se arrepiente, difícilmente se salvará. Purifica, pues, tu corazón de toda duda en tu ánimo, y ten fe, porque es fuerte, y confía en Dios para que recibas todas las peticiones que haces; y si después de pedir algo al Señor recibes tu petición con alguna demora, no vaciles en tu ánimo porque no has recibido la petición de tu alma al instante. Porque es por razón de alguna tentación o alguna transgresión de la que tú no sabes nada que no recibes la petición sino con demora. Por tanto, no ceses en hacer la petición de tu alma, y la recibirás. Pero si te cansas, y dudas cuando pides, cúlpate a ti mismo y no a Aquel que te lo da. Resuelve esta indecisión; porque es mala y sin sentido, y desarraiga a muchos de la fe, sí, incluso a hombres fieles y fuertes. Porque verdaderamente esta duda en el ánimo es hija del diablo y causa gran daño a los siervos de Dios. Por tanto, desprecia estas dudas del ánimo y domínalas en todo, revistiéndote de fe, que es fuerte y poderosa. Puesto que la fe promete todas las cosas, realiza todas las cosas; pero el ánimo indeciso, que no tiene confianza en sí mismo, falla en todas las obras que hace. Ves, pues», dijo, «que la fe viene de arriba, del Señor, y tiene gran poder; pero el ánimo vacilante es un espíritu terreno del diablo, y no tiene poder. Por tanto, sirve a la fe que tiene poder, y mantente lejos del ánimo vacilante, y vivirás para Dios; sí, y todos los que piensan igual vivirán para Dios.»
Décimo Mandato

«Ahuyenta de ti la tristeza», me dijo, «porque es la hermana del ánimo indeciso y el temperamento irascible.» «¿Cómo, Señor», le dije, «es hermana de éstos? Porque el temperamento irascible me parecer ser una cosa; el ánimo vacilante, otra; la pena, otra.» «Eres un necio», me contestó, «[y] no te das cuenta que la tristeza es peor que todos los espíritus, y muy fatal para los siervos de Dios, y más que todos los espíritus destruye al hombre, y apaga al Espíritu Santo, y por otro lado lo salva.» «Yo, Señor», le dije, «no tengo entendimiento, y no comprendo estas parábolas. Porque ¿cómo puede destruir y salvar?, esto no lo comprendo.» «Escucha», me dijo: «Los que nunca han investigado respecto a la verdad, ni inquirido respecto a la divinidad, sino meramente creído, y se han mezclado en negocios y riquezas y amigos paganos y muchas otras cosas de este mundo; cuantos, digo, se dedican a estas cosas, no comprenden las parábolas de la deidad; porque han sido entenebrecidos por sus acciones, y se han corrompido y hecho infructuosos. Como las viñas buenas, que cuando se las abandona y descuida se vuelven infructuosas por las zarzas y hierbas de todas clases, lo mismo los hombres que, después de haber creído, caen en estas muchas ocupaciones que hemos mencionado antes, pierden su entendimiento y no comprenden nada en absoluto con respecto a la justicia; porque si oyen acerca de la deidad y la verdad, su mente está absorta en sus ocupaciones, y no perciben nada en absoluto. Pero si tienen el temor de Dios, e investigan con respecto a la deidad y a la verdad, y dirigen su corazón hacia el Señor, perciben y entienden todo lo que se les dice más rápidamente, porque el temor del Señor está en ellos; porque donde reside el Señor, allí también hay gran entendimiento. Adhiérete, pues, al Señor, y comprenderás y advertirás todas las cosas.

»Escucha ahora, hombre sin sentido», me dijo, «en qué forma la tristeza oprime al Espíritu Santo y le apaga, y en qué forma salva. Cuando el hombre de ánimo indeciso emprende alguna acción, y fracasa en ella debido a su ánimo indeciso, la tristeza entra en el hombre, y contrista al Espíritu Santo y lo apaga. Luego, cuando el temple irascible se adhiere al hombre con respecto a algún asunto, y está muy contrariado, de nuevo la tristeza entra en el corazón del hombre que estaba contrariado y es compungido por el ácto que ha cometido, y se arrepiente de haber obrado mal. Esta tristeza, pues, parece traer salvación, porque se arrepiente de haber hecho el mal. Así pues, las operaciones entristecen al Espíritu, primero, el ánimo indeciso entristece al Espíritu, porque no consigue el asunto que quiere, y el temple irascible también, puesto que hizo algo malo. Por consiguiente, los dos contristan al Espíritu: el ánimo indeciso y el temple irascible. Ahuyenta de ti, pues, tu tristeza, y no aflijas al Espíritu Santo que mora en ti, para que no suceda que interceda a Dios [contra ti] y se aparte de ti. Porque el Espíritu de Dios, que fue dado a esta carne, no soporta la tristeza ni el ser constreñido 

»Por tanto, revístete de alegría y buen ánimo, que siempre tiene favor delante de Dios, y le es aceptable, y regocíjate en ellos. Porque todo hombre animoso obra bien, y piensa bien, y desprecia la tristeza; pero el hombre triste está siempre cometiendo pecado. En primer lugar comete pecado, porque contrista al Espíritu Santo, que fue dado al hombre siendo un espíritu animoso; y en segundo lugar, al contristar al Espíritu Santo, pone por obra iniquidad, ya que ni intercede ante Dios ni le confiesa. Porque la intercesión de un hombre triste nunca tiene poder para ascender al altar de Dios.» «¿Por qué», pregunté yo, «la intercesión del que está triste no asciende al altar?» Me contestó: «Porque la tristeza está situada en su corazón. Por ello, la tristeza mezclada con la intercesión no permite que la intercesión ascienda pura al altar. Porque como el vinagre cuando se mezcla con vino en el mismo (vaso) no tiene el mismo sabor agradable, del mismo modo la tristeza mezclada con el Espíritu Santo no produce la misma intercesión (que produciría el Espíritu Santo solo). Por consiguiente, purifícate de tu malvada tristeza, y vivirás para Dios; si, y todos viven para Dios, los que echan de sí la tristeza y se revisten de buen ánimo y alegría.»

FRAGMENTO DE "EL PASTOR" DE HERMAS